viernes, 1 de diciembre de 2006

Carcass - Reek Of Putrefaction

Guturas

carcassband.jpgAhí va una de esas bandas que permanecen a lo largo de los años y hacen de sus trabajos algo intemporal por el simple hecho de hacer algo que otros no han hecho antes, por tener ideas nuevas, por innovar, por buscar soluciones.

CARCASS Si alguien pensó que los hijos predilectos de Liverpool eran los Beatles, está muy, pero que muy confundido, porque ese mérito lo tiene Carcass.

La banda empezó a andar allá por el 85 y según cuentan los ancianos empezó dando tralla gansa. Todo el mundo quedó atónito ante la brutalidad de sus ritmos y de sus letras, verdaderos degenerados/enfermos.
Todo iba hacia arriba, sacaron 3 discos imprescindibles en la historia de lo extremo: “Reek Of Putrefaction” que es el que os propongo para escuchar, “Symphonies Of Sickness” y “Necroticism - Descanting the Insalubrious”. De ahí en adelante fueron suavizando su estilo y perdiendo fuelle, tal vez no de una manera consciente, sino porque era lo que su cuerpo les pedía, pero esto no lo entendieron muchos de sus seguidores. Al final se bañaron y, como quien dice, crearon otra bestia, ésta más pequeña, aunque actualmente más conocida y apreciada, el Death Metal melódico, pero sobre todo muy alejada de sus comienzos. Esto no quita para que fuera buena, seguía siendo una bestia despiadada y sanguinaria. También os recomiendo esos CDs aunque no con tanta euforia.

Como suele suceder en las mejores familias, cuando se discute hay 2 soluciones, arreglarlo o romper, y para la desgracia de toda la humanidad en el año 1996 nos dejaron.

Aclararé que cuando hablo de creadores de estilos, es algo muy relativo, porque hay un momento en el que muchos grupos tienden hacia una corriente, solo que solo es uno el que se lleva el merito y no todas las veces es merecido, habrá quien pueda decir que los creadores del Grindcore fueron Napalm Death y no Carcass, pues algo de razón tiene, aunque no es la versión oficial…

Después de leer tamañas genialidades sobre estos semidioses, os preguntareis cuales son sus nombres, pues ahí van Jeff Walker, Ken Owen y Michael Amott, hay otros pero su aportación al grupo fue menor o no supieron implicarse más.

El disco en cuestion como ya lo habreis leído mas arriba es “Reek Of Putrefaction”. Discazo, corto, atronador, plagado de temazos, pero con una pequeña tara que hoy en día seria inadmisible, pero entonces estaba a la orden del día. Su producción es bastante vieja/mala (en la vida real no son sinónimos, pero si cuando hablamos de producciones) y hace que desmerezca un poco, aunque tampoco me lo imaginaria con un sonido cristalino y tal vez no sonaría tan propio.

¡Ahí va el track list, que espero os haga devolver y gozar!

1. Genital Grinder
2. Regurgitation Of Gibletscarcass_reekofputrefaction.jpg
3. Maggot Colony
4. Pyosisified (Rotten To The Gore)
5. Carbonized Eyesockets
6. Frenzied Detruncation
7. Vomited Anal Tract
8. Festerday
9. Fermenting Innards
10. Excreted Alive
11. Suppuration
12. Foeticide
13. Microwaved Uterogestation
14. Feast On Dismembered Carnage
15. Splattered Cavities
16. Psychopathologist
17. Burnt To A Crisp
18. Pungent Excruciation
19. Manifestation On Verrucose Urethra
20. Oxidised Razor Masticator
21. Mucopurulence Excretor
22. Malignant Defecation
Como en el final de algunas películas os contare como a acabado la vida de algunos de los creadores de la bestia.

Jeff Walkers en la actualidad tiene un grupo de Country y se le vio no hace mucho acompañando a los Brujería como bajista. Según se dice aun añora los tiempos en los que Carcass era la bestia carnicera y despiadada que no dejaba títere con cabeza.

Michael Amott en la actualidad y como grupo mas destacado posee a la maquina de hacer dinero Arch Enemy, grupo que para gloria y fortuna de sus creadores tras una época de calidad, pero penumbra económica dio con la formula de poner a una jovenzuela de buen ver y que grita como quiere. Esto no ha convertido al combo en unos rancios, pero eso de Death Metal Melódico se ha olvidado y ahora hacen más bien un heavy con voces “guturales”. Tampoco esta tan mal.

Ken Owen sin duda fue el más desgraciado en toda esta historia puesto que sufrió un derrame cerebral que le llevo a estar 10 meses en coma y le imposibilito para tocar la batería. En la actualidad se dice que sigue intentándolo, todo un ejemplo a seguir…

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