Joint venture

El diván de Sagra Máttikha

Cuando, en su momento, Inditex (Zara y compañía) quiso entrar en Alemania, Italia o Japón, pensó que lo mejor era hacerse amiga de una empresa local que conociera el mercado y la llevara de la mano. Así que estableció relaciones comerciales formales con Otto Versand, Bigi y el Gruppo Percassi respectivamente (como cuando James Bond se liga a la tía buena de la embajada, pero más rollo comercial). Et voilá: a vender ropa.

Técnicamente lo que hicieron fue firmar una joint venture con cada una. A esto en castellano también lo llamamos alianza estratégica, alianza comercial o incluso riesgo compartido.

El rollete puede tener finales distintos (como Bond): unas veces terminan con una separación de mutuo acuerdo, ya pactada desde el principio; otras, una de las dos acaba absorbiendo a la otra. Lo que no hacen es constituir una tercera empresa, porque eso sería una fusión, o una absorción (boda en James Bond, que tampoco ocurre nunca).

Pero no siempre se hace para entrar en un país extranjero. A veces se hace para abrir mercado en un sector difícil, pero con posibilidades a largo plazo, como el mundillo del petróleo. Así hicieron Repsol YPF, Global Petroleum, Woodside y Dana para explotar unos yacimientos en Kenia. Aparte de esto, cada cual a lo suyo.

En fin, que en el amor, en la guerra y en el comercio todo vale.

(haz clic en la imagen)